Especie muy extendida por toda la región Holártica aunque se observa una regresión en algunos países europeos como Gran Bretaña y Francia posiblemente por el uso de insecticidas agrícolas.
Vuela planeando majestuosamente y recuperando altura con poderosos aleteos desde mayo a septiembre en dos generaciones solapadas. Sus llamativas orugas tienen el tegumento liso y de color verde claro y presentan anillos negros transversales con seis puntos rojos cada uno. Detrás de la cabeza poseen un órgano anaranjado y bífido (el osmaterium) que evaginan cuando están en peligro emitiendo un fuerte olor. Se alimentan de diversas umbelíferas como: Daucus carota, Foeniculum vulgaris, F. officinalis y a veces de Ruta montana y R. graveolens. La crisálida es invernante.
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